Arquitectura Decoración EDICIÓN Nº 177
Hasta la Oficina Caminando
Hay quienes aseguran que ir caminando al trabajo y evitar largos trayectos en auto es sinónimo de calidad de vida. Con esta certeza, un matrimonio de profesionales salió a buscar […]
Hay quienes aseguran que ir caminando al trabajo y evitar largos trayectos en auto es sinónimo de calidad de vida. Con esta certeza, un matrimonio de profesionales salió a buscar un pied á terre cerca de su oficina en Recoleta y así reservar su casa de San Isidro para los fines de semana. Un plan perfecto, ya que los dos hijos mayores también trabajan en el centro y los dos menores estudian en la universidad.
El nuevo capítulo empezó cuando finalmente encontraron un lugar a cinco cuadras del trabajo. Convocaron a la arquitecta Beatriz Blanco para ejecutar la reforma que tomó seis meses de obra: “el departamento estaba destruido. Tenía cielorrasos de distintas alturas, un living compartimentado, papeles de distintos colores, griferías antiguas. La consigna fue clara: tenía que ser fácil de mantener, de limpiar y espacioso”. Así, las paredes se tiraron abajo para crear ambientes con más luz, y la cocina y baños se hicieron a nuevo. “Como mis clientes son detallistas y le dan importancia a la estética, instalamos las cañerías de la calefacción debajo del piso, y para preservar la fachada, la unidad exterior del aire acondicionado se ocultó en el aire luz del edificio”. El interiorismo se resolvió mezclando texturas en una paleta neutra y los muebles, en su mayoría de Solsken, aportan calidez.
Texto: Marina Aranda.
Fotos: Adela Aldama.