Arquitectura Diseño Edición Nº 189
EN HOMENAJE A ITALIA
“¿Y si hacemos una villa romana?”. La inspiración para proyectar la casa en San Isidro surgió durante un viaje a Italia entre un grupo de amigos, integrado por un matrimonio […]
“¿Y si hacemos una villa romana?”. La inspiración para proyectar la casa en San Isidro surgió durante un viaje a Italia entre un grupo de amigos, integrado por un matrimonio con cinco hijos, los arquitectos Diego González Pondal y Fernando Malenchini, y la diseñadora de interiores Constanza Di Cocco. Los primeros guiños a la arquitectura clásica del norte de Italia se revelan en “la fachada blanco jazmín, las ventanas enmarcadas en mármol gris y las celosías color laurel”, cuenta la interiorista frente a la propiedad de dos pisos con altillo.
Una vez en la cocina, recuerda la primera visita a la marmolería “donde la dueña se enamoró de una placa verde que combinaba perfecto con las persianas que habían propuesto los arquitectos. Realizamos el equipamiento en el mismo tono y sumamos las sillas rosas. Teniendo en cuenta que la cocina se ve desde el comedor, entelamos las paredes de éste en verde más oscuro y así fuimos hilando los colores, de más claro a más potente, llegando al living donde los sillones son color habano”. El siguiente ambiente es el del dueño – con living, cocina y televisión – que puede funcionar independiente de la casa: “Los grises neutros en entelados y cortinas intentan marcar su territorio”.
La sinergia que se logró en el proyecto tiene su explicación, según Constanza, “en el origen italiano de las personas que participamos, desde los propietarios y los arquitectos, que tienen casa en Florencia, hasta Marroncelli que realizó las aberturas color jazmín, y los dueños de Mármoles exclusivos y de SBG. Nos entendimos rápido porque todos seguimos la misma línea estética. Es nuestro homenaje a Italia”.
CREDITOS: Estudio de Interiorismo Constanza Di Cocco de TW Buenos Aires, Estudio de arquitectura Diego González Pondal y Fernando Malenchini de Pondal Malenchini.
PH: Arq. Daniela Mac Adden.
Texto: Marina Aranda.