Decoración
Una casa pura ventana
Un grupo de mujeres talentosas ocupa el centro de esta historia. Por un lado, Paz, Agustina yLola Caradonti, y Paquita de Tezanos Pinto, socia en el área de las decoración de interiores;por el otro, una propietaria con intención de que cada espacio de su casa invitara al disfrute.
“La clienta quería hacer un refugio para ella y su hijo, en el que vivir, pero también trabajar”, afirma Paz Caradonti. En medio de reuniones y llamadas de teléfono, desanda este proyecto cuando todavía recuerda las sensaciones que la movilizaron en el último Salone del Mobile. “La feria de Milán te abre la cabeza, no solo el centro de exposiciones sino toda la ciudad. No parás de absorber información, a un punto casi desesperante”, cuenta.
Ubicada en las afueras de la ciudad, la propuesta llegó en el momento justo: “La propietaria tuvo la inteligencia de llamarnos apenas compró para que la ayudáramos a definir todo, no solo el interiorismo”. De ese modo, las hermanas se unieron a la arquitecta Ana Carrera.
“Nunca habíamos trabajado con ella y fue una experiencia alucinante. Nos entendimos perfectamente de entrada y nos complementamos muy bien”. La vivienda presentaba grandes retos. “Es muy particular. Tiene desniveles, recovecos. Una distribución complicada con muchas curvas por todos lados, y también espacios con techos muy bajos. Pero era una arquitectura sólida y con personalidad así que, apenas la vimos con Paquita, nos enamoramos del desafío”. Los deseos de la propietaria estaban claros: disfrutar los espacios sin miedo.
“Quería trabajar, cocinar, recibir y vivir cada ambiente”. En esa línea, además, integraron los exteriores de la mano de la paisajista Agustina Anguita. “Sabíamos desde el comienzo que el paisaje era tan o más importante que el interiorismo. Al ser pura ventana, el parque asoma componiendo las obras de arte de la casa”.
Sillas de Manifesto, mesa de las hermanas Caradonti y lámpara de Garzón Maceda para el comedor.
Íntegramente diseñada por la arquitecta Ana Carrera, la cocina es a la vez espacio de trabajo y reunión. En el comedor diario se cambió el cerramiento por un gran ventanal. Mesa de chapa blanca con sillas de HUS, bandeja y objetos de HC Home.
En el cuarto del bebé, muebles estilo Montessori de Marcia Morán; la cuna es el modelo Bon Día Petit, las sillas y la mesa son de la serie Petit. En el pasillo, obra de Andrea Santarelli.
Para el dormitorio principal, cubrecama de Duvet y almohadones de Agave. Mesas laterales de las hermanas Caradonti y Paquita de Tezanos Pinto, alfombra de RUGit y lámparas de Ikea. El artefacto colgante es el modelo Ginger de Vibia (Agüero Iluminación). En el baño, mármol de Carrara con artefactos de luz de Huup.
“Mediante un binder blanco se reflejó la curva del balcón en el suelo. La vegetación abundante que la delimita ancla amigablemente la casa al terreno”, explica Paz Caradonti acerca de un espacio clave, equipado con banco y mesa de Números Primos. Para el playroom, mesa de chapa y sillas de Manifesto. La lámpara es el modelo Tolomeo mega.