Edición Nº178 Inspiraciones
El alma de todas las cosas
Alejandra “Mono” Giraud es una artista multidisciplinaria, capaz de expresarse mediantela pintura, la fotografía, el collage y lasinstalaciones. Luego de diseñar para grandes marcas de indumentaria y firmas de decoración, […]
Alejandra “Mono” Giraud es una artista multidisciplinaria, capaz de expresarse mediantela pintura, la fotografía, el collage y lasinstalaciones. Luego de diseñar para grandes marcas de indumentaria y firmas de decoración, en 2010 fundó Costado, un espacio de muebles y objetos industriales que mantuvo hasta 2017. Hoy despliega su talento creativo en Monogiraud, su propia línea de mobiliario y textiles de formas simples y orgánicas, realizadas con materiales nobles y una paleta de colores naturales.
Raíces “Me inspiran las raíces de los árboles, esa parte oculta bajo la tierra a la que sigue lo visible. Permiten que el tronco se mantenga en pie y de ahí se desprenden las ramas, con sus hojas y frutos. Me fascinan esas formas orgánicas que, por separado, pueden no decir mucho, pero que juntas, entrelazadas y flexibles, soportan al árbol todo. Llevado al trabajo, significa la contundencia de una colección, algo que trato de plasmar en mi local y en cada creación: lo que no se ve de una marca es lo que luego sostiene su estructura”.
Espacio público “Encuentro inspiración en la calle, en el afuera, donde todo está en tránsito, donde cada quien va en viaje de un lado a otro, en absoluto movimiento. En la calle lo que importa es trasladarse. Uno no sabe con qué se puedeencontrar en la travesía. Disfruto y aprendo de cruzarme y comunicar con personas que no conozco. De sorprenderme, porque sé que me voy a encontrar con cosas que no esperaba, ni estaba yendo a buscar. En la calle es donde sucede la magia”.
Los artesanos “Paso mucho tiempo en fábricas y talleres tratando de aprender de quienes dominan su oficio. Busco comprender las técnicas para aplicarlas a mis desarrollos y saber lo que se puede hacer y lo que no, en función de los materiales y procesos. Me sumerjo en la producción hasta saber cómo funciona cada engranaje para combinarlos de la mejor manera. Así, la idea inicial se va adaptando en el camino hasta llegar al producto final. Aprendí aaprovechar del artesano o el operador lo que mejor sabe hacer de su oficio, especialmente cuando sienten pasión por su trabajo. Eseintercambio fluido le da un carácter único al resultado. Así es como una pieza termina teniendo alma, que es lo que busco en todo lo que hago”.
Ballet “Ese universo de sensaciones y emocionesque es el ballet, y en el Teatro Colón, me inspira. Hay un clima, un olor, un sonido. Movimientos, armonía. Sin hablar, los cuerpos de los bailarines cuentan historias mediante expresiones exageradas y a la vez etéreas. Gestos que impactan en el estado de ánimo de quien está sentado sea en primera fila, o en el último balcón. Me identifico con esa combinación de sutileza y contundencia, y lo llevo a mi trabajo, tratando de ser sutil, comunicando solo una pequeña parte y dejando que el otro se haga un mundo con eso”.
La cúpula “Tengo mi espacio personal en una cúpula ubicada en el microcentro de Buenos Aires. Es el último piso de un edificio increíble de estilo inglés construido en 1920. Es una fuente de inspiración extraordinaria. Allí es donde me refugio, leo, anoto, pinto, corto, ensucio, bailo, escucho, imagino, planifico. Es mi lugar para experimentar. No tiene ambientes en ángulo, sino que todas las habitaciones son de formas redondeadas. Hay una energía muy poderosa.”
Texto: Jimena Sampataro.