Nuevos Proyectos 

Nuevos Proyectos: Marcelo Sampataro

Emprender en Argentina con una pandemia de por medio no es nada fácil. Sin embargo, el pastelero Marcelo Sampataro sintió que era el momento perfecto para dar comienzo a Rulli, […]

Emprender en Argentina con una pandemia de por medio no es nada fácil. Sin embargo, el pastelero Marcelo Sampataro sintió que era el momento perfecto para dar comienzo a Rulli, un proyecto que rápidamente se convirtió en negocio familiar cuando se sumó Cecilia, su hermana. Juntos crearon una pastelería boutique, llena de sabores y con una estética sumamente cuidada.

¿Cómo fue pasar de la vida corporativa a la gastronomía?

Debo admitir que como todo emprendimiento tiene sus altibajos donde todo lo que tenés en la cabeza hay que transformarlo a algo más terrenal. Pasar de la tranquilidad de la relación de dependencia a emprender no es nada fácil sin el apoyo de la familia.

¿Qué es Rulli?

Rulli es el apellido de mi nonna materna, Chiquita. Ella fue la persona que me hizo amar la cocina y quien me enseñó a preparar una mesa para compartir en familia. Para mí la marca es un homenaje a ella, una celebración entre quienes confían en nuestro trabajo y sus seres queridos.

¿Cuál es la especialidad de la casa?

Según nuestros clientes son la Pavlova en primer lugar, seguida por nuestra Carrot Cake especiada, y la torta Ana, en honor a mi mamá.

¿Dónde compras los mejores materiales en Buenos Aires?

Mi tienda predilecta es La Botica del Pastelero, donde encuentro cosas específicas como moldes para decorar. Lo más novedoso está siempre en Sprinkles and More, y los huevos de yema dorada, que todo pastelero quiere en su cocina, son de Huevos Carapachay.

¿Qué considerás los destaca del resto?

La pasión que le ponemos mi hermana y yo a nuestro trabajo. Negocios de pastelería abundan, pero para nosotros es importante escuchar al cliente, y celebramos las cosas que nos elogian, del mismo modo que corregimos si algo sale mal.

¿Un sueño por cumplir?

Abrir nuestro local a la calle. Afortunadamente, aún en este contexto, Rulli está creciendo. Eso conlleva a adaptarse para poder acompañar la demanda de nuevos clientes que nos desafían a mejorar y a continuar ofreciéndoles una pastelería novedosa y con opciones para que todos puedan disfrutar y celebrar junto a nosotros en su mesa.